miércoles, 14 de diciembre de 2016

Sabernos nuestros




Sabernos nuestros

Hoy que soy tuya, completamente tuya,
tan libremente tuya que vuelo en sueños
para surcar tu cielo hasta llegar a tu lado,
que me sumerjo en el fondo de tu infierno
para jugarme a las cartas con todos tus demonios
las noches que empezarán a ser mías y te librarás de ellos,
nunca hice tantas trampas como ahora
y en el as que escondí bajo tu manga,
no está la carta de la partida ganada
pero sí la que completa la escalera para llegar a mi alma.

Hoy que soy tuya y no te pertenezco,
 me entrego por completo a nuestra causa,
 pongo en tus manos la llave de toda mi esperanza
y encuentro en tus labios la clave al enigma que descifra la palabra
 y es que para hablar de ti, de mi, de nosotros,
ni siquiera necesito recurrir al tan manido amor
que tantas lenguas blasfemaron
 prostituyendo de mentiras lo más puro,
solo necesito acariciar entre los labios las letras de tu nombre
 y saber que es ahí donde reside
el secreto, el misterio, la magia y nuestros sueños.

Hoy que soy tuya, hoy que es siempre y por siempre,
te entrego lo más valioso y lo único que tengo,
la libertad de elegirte, de entregarme,
de soñarte y saberte mío, de sabernos nuestros...


Carmen Cano.